MAQUILLAJE NATURAL PARA PIELES MADURAS

Este Día de la Madre he querido rendir un pequeño homenaje a la mujer que me enseñó y me enseña tanto, también sobre belleza: mi madre. Y lo he hecho de la forma que mejor sé — compartiendo contigo un momento de autocuidado juntas, mientras la maquillaba con un look natural, luminoso y favorecedor, pensado especialmente para realzar la belleza de las pieles maduras.

Porque a cualquier edad, vernos bien tiene mucho que ver con sentirnos bien. Y con unos pocos pasos adaptados a las necesidades de la piel con el paso del tiempo, es posible conseguir un resultado fresco, elegante y muy favorecedor.

Hoy te explico cómo hacerlo tú misma o cómo regalar un momento especial a tu madre, hermana o tía, con un maquillaje pensado para realzar, no cubrir.

1. La preparación de la piel lo es TODO

Antes de pensar en bases, sombras o colorete, es esencial hidratar bien la piel. A medida que cumplimos años, la piel tiende a volverse más seca, y una buena hidratación hace que el maquillaje se funda mejor y no se acumule en las líneas de expresión.

  • Aplica una crema hidratante rica pero ligera.

  • No te olvides del protector solar (sí, incluso en días nublados).

  • Si tienes una prebase que difumine poros o que aporte luminosidad, úsala solo en zonas clave: mejillas, frente, contorno de ojos. Así no recargas el rostro y potencias la luz natural.

2. Menos es más: base ligera y luminosa

Uno de los errores más comunes es aplicar demasiado producto. La base debe unificar el tono, no cubrirlo por completo. Opta por una fórmula ligera y luminosa, y aplícala solo donde lo necesites: mejillas, barbilla, alrededor de la nariz.

Si no hace falta, usa solo corrector en zonas puntuales. Y para ojeras marcadas, los tonos melocotón o salmón neutralizan el color violáceo sin crear un efecto acartonado.

3. Colorete y bronceador: frescura en el punto justo

El rubor puede rejuvenecer el rostro de forma inmediata. Aplícalo en la parte alta del pómulo, ligeramente hacia la sien, para elevar visualmente el rostro.

El colorete en crema es ideal si buscas un acabado jugoso. Puedes combinarlo con un toque de bronceador suave si quieres más definición.

4. Ojos: suavidad y definición

El objetivo no es cargar el párpado, sino definir sin endurecer. Opta por sombras en tonos tierra, melocotón o rosados suaves, y difumina muy bien para evitar cortes duros.

Una línea fina a ras de las pestañas, bien difuminada, puede dar profundidad.

Asimismo, un buen rizado de pestañas y máscara negra o marrón hacen milagros.

5. Cejas: estructura sin rigidez

Las cejas enmarcan el rostro y, con los años, tienden a perder densidad. Un lápiz fino de cejas te permite definir sin sobrecargar.

Sigue la forma natural, rellenando huecos con toques suaves y fija con un gel si necesitas mantenerlas peinadas durante el día.

6. Labios: definición natural

Con el paso del tiempo, el contorno de los labios puede difuminarse. Un perfilador suave evita que el pintalabios se desplace y ayuda a definir la forma.

Elige colores suaves y cremosos: rosas, nude, melocotón. Si buscas volumen, evita los mates secos y apuesta por el brillo sutil.

Un regalo de autoestima (para ti o para ella)

Este tipo de maquillaje no solo realza rasgos, también reconcilia con el espejo. Y eso no tiene edad.

Si te gustaría aprender más técnicas como estas, o regalar una experiencia de asesoría de imagen a una mujer especial en tu vida, no dudes en escribirme. A veces, un pequeño gesto puede transformar el día (¡y la autoestima!) de una madre, una hija o una amiga.

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