VESTIR COMO TE GUSTE, SIN MIEDO
“Me encantan los zapatos de colores, pero aquí no me atrevo a ponérmelos, la gente me miraría raro”.
Esta frase me la han dicho muchas veces mis clientas, y no solo con zapatos: también con vestidos estampados, sombreros, bolsos llamativos o prendas que, simplemente, les encantan… pero que se quedan colgadas en el armario.
Lo curioso es que muchas sí se animan a ponérselas cuando viajan o van a otra ciudad. ¿Por qué? Porque sienten que fuera de su entorno hay más anonimato, menos miradas, menos juicio.
El miedo a “dar que hablar”
No todos los días tenemos la misma seguridad en nosotras mismas. Hay momentos en los que, incluso sintiéndonos bien con nuestro look, nos incomoda la idea de llamar la atención. Y tendemos a pensar que las miradas o comentarios que podamos recibir serán por algo negativo.
Sin embargo, esta percepción no siempre es real. Muchas veces, esas miradas no son de crítica, sino de interés o admiración. El problema es que solemos fijarnos más en el posible juicio negativo que en el positivo.
Una verdad incómoda (y liberadora)
Te pongas lo que te pongas — incluso aunque te escondas siempre bajo ropa negra, holgada y sin forma — siempre habrá alguien a quien no le guste cómo vas vestida.
Y al mismo tiempo, siempre habrá alguien que piense que vas estupenda.
Si no podemos controlar la opinión de los demás… ¿por qué no vestir de la forma que nos hace felices a nosotras? Igual que tomamos decisiones en nuestra vida basándonos en lo que creemos mejor para nosotras — y no en lo que piensan los demás —, podemos hacer lo mismo con nuestra ropa.
Apropiada, sí. Limitada, no.
Esto no significa ignorar el contexto. Evidentemente, no irías en bikini a la boda de tu prima ni en vaqueros rotos a una reunión muy formal.
Pero dentro de lo que es apropiado para cada ocasión, tienes margen para expresarte.
Ponte esos zapatos rojos, ese sombrero de fieltro o esa chaqueta de color vivo. No cambiará la vida de nadie más… pero puede que sí la tuya. Al menos ese día, te sentirás más tú.
Si no sabes por dónde empezar…
Soy Ainara González, asesora de imagen a domicilio en Euskadi.
Si quieres empezar a vestirte como realmente te gustaría, pero no sabes cómo dar el primer paso, escríbeme por WhatsApp.
Estaré encantada de ayudarte a encontrar un estilo que te represente y con el que te sientas segura.
